La falta de catalizadores y el nivel elevado de los principales indicadores bursátiles en Estados Unidos (EU) han provocado que se incrementen los augurios de una inminente corrección en las cotizaciones accionarias. En México, este movimiento ya comenzó, de la mano de algunos reportes trimestrales de empresas significativas en la composición del índice de precios de la bolsa mexicana.
Sin embargo, las noticias recientes internacionales no han sido tan negativas que reduzcan apreciablemente la preferencia por activos de mayor riesgo, lo que aunado a la prevalencia de las políticas monetarias laxas, mantienen un entorno de liquidez que favorece la búsqueda de mayores rendimientos.
Sin embargo, esto no basta para que se produzcan correcciones, derivadas de retiros de utilidades o de una actitud precavida de los inversionistas. De manera que los mercados se encuentran ahora en esa disyuntiva, entre mantener posiciones presumiblemente ascendentes, o retirar parte de las utilidades.
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